miércoles, 30 de noviembre de 2011

JOHN LENNON



UN ANECDOTA DE NOE CRUZ

Diciembre de 1980.

Después de un tedioso viaje matutino, arribaba al plantel del C.C.H Atzcapotzalco. Todo el trayecto me pregunte si la tarea estaba bien, si me peine correctamente, si la chica de cuarto semestre estaría dispuesta a salir el sábado conmigo y nada parecía indicar que ese fuera un día especial en absoluto. Llegue con algunos minutos de retraso a mi primer clase y mientras atravesaba el patio en busca del salón que me correspondía, escuche cantar Woman a algunos jóvenes reunidos dentro de un aula, acompañados por guitarras y un pandero, este hecho me sorprendió pero no tenía tiempo de detenerme a investigar y continué mi camino imaginando que participaba en tan agradable evento y que todas las chicas del plantel quedaban perdidamente enamoradas de mi al escuchar mi bella voz y descubrir mi virtuosismo en la guitarra. Por supuesto era solo un sueño recurrente en mi cerebro en aquella época. Al entrar en el salón, note al primer vistazo un grupo ubicado casi al centro, que rodeaba a Luz María, una bella compañera, que por desgracia me tenía una gran antipatía. No había maestro impartiendo clase, por lo que reinaba un gran barullo y al llegar con mis amigos pregunte
- ¿Que onda con esa bolita?
La forma como me veían mis camaradas me inquieto.
-¿No sabes?- Me interrogo Alejandro.
-¿Que, wey?- Presintiendo lo peor y notando por primera vez que Luz María lloraba y el grupo que la rodeaba intentaba consolarla-¿Que es lo que no se? Dime, no mames.
-Mataron a Lennon- Sentencio y espero a ver mi reacción. Todos mis amigos conocían mi afición, casi fanatismo por el cuarteto Liverpool. Yo voltee nuevamente hacia el grupito desde donde vi dirigirse hacia mí a Paty (En ese entonces mi novia) Quien al llegar a mi me abrazo y llorando me dijo- Tranquilo, tranquilo. No sabes cuánto lo siento.
Sentí un hormigueo subir desde mis pies y al llegar a la cabeza me causo un mareo repentino y una furia enorme que de inmediato enfoque hacia mis amigos y novia.
- ¡Ya déjense de mamadas y díganme que está pasando!- Grite.


- Lo balacearon.- Respondió Paty- Iba llegando a su casa y lo balacearon, no sobrevivió. ¿Cómo es que no te habías enterado? Todos hablan de eso.
En mi mente se fueron agrupando los detalles y comprendí, con la mitad de mi mente que no me gastaban una broma, volví la vista y nuevamente observe a Luz María que parecía inconsolable, pero ¿Lennon, muerto a balazos? El Hombre de la filosofía pacifista, el líder de pensamiento, el místico, el genio que influyo en mi generación y en la anterior ¿muerto a plomazos?


Ese día Radio Éxitos organizo un apagón de media hora en honor al genio, de ocho a ocho y media de la noche los admiradores de lennon apagamos las luces de nuestras casas. Adivina cuantas casas apagaron sus luces en mi colonia. Solo una, la mía (Y eso contra resistencia de mi madre y mi abuelo, a quienes Lennon les venía mas guango que los calzones de Capulina) Y mientras yo me disponía a escuchar la programación en su honor, mi madre me exigía que me dejara de pendejadas y encendiera la luz “Total a ese hijo de la chingada ni lo conoces”
Saque los huevos a orear y ni madres que permití que se encendieran los focos (Cuatro pinches focos, tampoco creas que vivía en una pinche mansión, pero bueno Algo es Algo - Dijo Un Calvo)
Los días siguientes, procure explicarles la importancia que las ideas de ese cabron tenían en mi generación a lo que me respondían con bromas y uno que otro cortón, pero el colmo fue cuando el pinche Chilio (Un Wey como de mi edad) exclamo en el paroxismo de la sorpresa ,mientras escuchaba Just Like Startin Over - ¡No mames¡ Ese pinche" yon lenon", nomas se murió y se volvió bien famoso- Que poca madre, cuantos cabrones estaban ignorantes y me vinieron a la mente las tardes con Carrillo y El Chino, en las que diccionario y cancionero en mano nos poníamos a traducir sus canciones, frase a frase y yo me sorprendía al ver que eran exactamente lo contrario de lo que imaginaba cuando las escuchaba por primera vez. Mis compañeros de primaria y yo eramos aficionados de los grupos mas representativos del rock, así algunos eran seguidores de Creedence, otros de Rollin Stones , de Doors y de Beatles y muy seguido nos veíamos envueltos en discusiones para demostrar la superioridad de uno u otro grupo, mis amigos y yo, conseguíamos muy frecuentes victorias , gracias a esas sesiones de traducción, ya que la mayoría de nuestros contrincantes no sabían ni el significado de las letras de sus grupos, además el hecho de que Carrillo cuidara un puesto de revistas nos permitia estar al tanto de las noticias mas recientes de aquellos que habían sido parte de Beatles.


Al terminar mi primaria nos mudamos a vivir a Chalco Estado de Mexico y el cambio de vida en comparación con la 201 era en verdad extremo, Mi actitud que en la 201 resultara tan efectiva, aquí no hizo si no atraerme cantidad de enemistades y weyes que yo ni conocía o recordaba me querian partir la madre, con la muerte de Lennon corrobore que pasaria mucho tiempo para conseguir amigos como los que deje atrás.


Con Lennon murió mas que un músico grandioso, murió un filosofo de época, un líder y el ultimo gran rebelde del rock (No basta con dejarte la greña, contorsionarte y ponerte hasta la madre de alcohol y drogas para ser un rebelde) y el sueño de ver reunidos así fuera una última vez, al cuarteto Liverpool.


NOE CRUZ

miércoles, 23 de noviembre de 2011

DURARA LO QUE DURE EL MUNDO



BUSCÁNDONOS

Nadie encuentra lo que no está buscando.
No es verdad que las cosas aparecen de pronto;
que, sorpresiva­mente, cuando para la lluvia,
vemos una hermosísima flor en el tallo en el que an­tes no había nada.
Allí hubo, por lo menos, un capullo cerrado,
algo que estaba por abrirse, por transformarse en flor...
Cuando un hombre encuentra a una mujer,
cuando una mujer encuentra a un hombre...
los dos estaban buscándose.
Por soledad.
O por dolor.
O por ganas de revivir la vida insu­flándole oxígeno a los pulmones.
O porque sí.
¿Por qué explicarlo todo?
¿Por qué decir que la causa, el efecto,
que la casualidad no existe, que...?
Mejor pensemos que lo importante es que,
cuando no hay alguien a nuestro lado,
no hacemos comida (¿para mí solamente? No...),
no gastamos el frasco de perfume,
duran menos las latas de atún
y más las milanesas en el refrigerador,
compramos con más nostalgia que alegría
un ramito de flores para llevar a casa,
y estrenamos muy pocas cosas.
Se van yendo las ganas,
como se va la luz, poquito a poco...
Y la noche nos asesta su golpe con el recuerdo,
nos envía sus fantasmas más tristes,
sus sombras incansables e inclementes.
La noche que no termina nunca,
que crece, que atormenta, que entrevera nombres, que ronda,
que agiganta las lágrimas hasta transformarlas en un océano.
Estamos solos porque no hacemos una llamada.
Porque no damos el paso que nos acerca.
Porque no decimos la primera palabra
que se transforme en puente...
Nadie encuentra lo que no está bus­cando.
¿Por qué crees que tú y yo nos encon­tramos?
¿Desde dónde venías acercándote?
¿Desde cuándo yo esperaba que llegaras?

¿Por qué yo?
¿Por qué tú?
¿Por qué nosotros?
¿Por qué crees que no te desviaste, con otro rumbo,
que no fuiste más hacia el sur, o más al norte,
o al otro lado del mar in­calculable?
¿Por qué piensas que me detuve para que pudieras alcanzarme,
extender las dos ramas de tus brazos,
abarcarme con toda tu ternura como diciéndome
"Ahora ya no te pasará nada malo, nada triste, nada cruel;
puedes dejar de llorar, puedes dormir con los ojos cerrados,
mansamente y al despertar, no estarás sola...
Nunca más estarás sola; y yo no estaré solo nunca más... "
¿Por qué?...
Porque los dos estábamos buscándonos.
Porque desde aquella lejana, lejanísima primera vez que nos encontramos,
quedó un delgado, finísimo, invisible hilo uniéndo­nos...
un hilo que nada puede cortar,
un hilo que atraviesa paredes, muros, mon­tañas...
un hilo indestructible que no soltaste, que no solté,
y que al fin volvió a reunirnos para que la historia termine su retrato,
tal vez poniendo un poco menos de tonalidad en la paleta,
o distintos colores y brillos,
pero retornando a los dos mismos protagonistas.
Tú y yo. Regresando. Volviendo al paraíso prometido
que salimos a buscar sin saber que lo teníamos tan cerca, debajo de los pies.
Cuando un hombre encuentra a una mujer,
cuando una mujer encuentra a un hombre...
los dos estaban buscándose.
Nadie encuentra lo que no está bus­cando.
¿Me entiendes, ahora?
Nos encontramos porque nunca nos dejamos de buscar…


Texto de Poldy Bird de "Durará lo que dure el mundo"

EL ARTE DE AMAR



Erich Fromm en su libro "El Arte de Amar"
habla de una diferencia entre
enamoramiento y amor.


Nos enamoramos cuando conocemos a alguien por quien nos
sentimos atraídos y dejamos caer frente a
el o ella las barreras que nos separan de
los demás.



Cuando compartimos con esa persona
nuestros sentimientos y pensamientos más
íntimos, tenemos la sensación de que, por
fin, hicimos una conexión con alguien.



Este sentimiento nos produce gran placer,
hasta la química de nuestro cuerpo cambia,
dentro de el se producen unas sustancias
llamadas endorfinas.



Nos sentimos felices y andamos todo el día
de buen humor y atontados.



Cuando estamos enamorados nos parece que
nuestra pareja es perfecta y la persona
más maravillosa del mundo. Esa es la
diferencia entre enamoramiento y el amor.



Empezamos a amar cuando dejamos de estar
enamorados.
¿Que? Así es.



El amor
requiere conocer a la otra persona,
requiere tiempo, requiere reconocer los
defectos del ser amado, requiere ver lo
bueno y lo malo de la relación.



No quiere decir que enamorarse no es
bueno, al contrario es maravilloso. Sin
embargo es solo el principio.



Muchas personas son adictas a estar
enamoradas. Terminan sus relaciones cuando
la magia de haber conocido alguien nuevo
desaparece; cuando empiezan a ver defectos
en la otra persona y a darse cuenta que no
es tan perfecta como pensaban.
El verdadero amor no es ciego.



Cuando amas
a alguien puedes ver sus defectos y los
aceptas, puedes ver sus fallas y quieres
ayudarle a superarlas.



Al mismo tiempo esa
persona ve tus propios defectos y los
entiende.



El amor verdadero esta basado en
la realidad, no en un sueño de que
encontraste a tu príncipe azul o a tu
princesa encantada.



Encontraste a una persona maravillosa, de
acuerdo, pero no es perfecta ni tu
tampoco.



Encontraste a tu alma gemela, pero también
los gemelos discuten y también tienen
diferencias.



Amar es poner en una balanza lo bueno y lo
malo de esa persona y después amarla. El
amor es una decisión consciente.



Muchas veces oímos de personas que dicen
que se enamoraron de alguien y que no
pueden evitarlo.



Que se supone que es una cuestión de
suerte?



Que se supone que amamos por arte de
magia?



Que se supone que alguien mas tiene poder
sobre nosotros?



De ninguna manera. Puedes sentir una gran
admiración por alguien, puedes desear
tener una relación con alguien, puedes
estar muy agradecido por lo que alguien ha
hecho por ti, pero... no la amas.



El amor nace de la convivencia, de
compartir, de dar y recibir, de intereses
mutuos, de sueños compartidos.



Tu no
puedes amar a alguien que no te ama, o que
no se interesa en ti. El amor verdadero es
reciproco.
Recibes tanto como das.



Si en este momento, tu mismo tienes un
"amor imposible" debes estar molesto
conmigo tal vez estas pensando: Como es
posible que me digas esto? Que no ves que
es amor lo que siento?



No te culpo, yo también tuve alguna vez
amores imposibles y también sentí la
frustración de que esa persona no me
hiciera caso o me abandonara. Pero te
repito.
No puedes amar a alguien que no te ama.

LA FELICIDAD DE DAR



La Felicidad de Dar



El pequeño Chad era un muchachito tímido y callado. Un día, al llegar a casa, dijo a su madre que quería preparar una tarjeta de San Valentín para cada chico de su clase. Ella pensó, con el corazón oprimido: "Ojalá no haga eso", pues había observado que, cuando los niños volvían de la escuela, Chad iba siempre detrás de los demás. Los otros reían, conversaban e iban abrazados, pero Chad siempre quedaba excluido. Así y todo, por seguirle la corriente compró papel, pegamento y lápices de colores. Chad, dedicó tres semanas a trabajar con mucha paciencia, noche tras noche, hasta hacer treinta y cinco tarjetas. Al amanecer del Día de San Valentín, Chad no cabía en sí de entusiasmo.

Apiló los regalos con todo cuidado, los metió en una bolsa y salió corriendo a la calle. La madre decidió prepárale sus bizcochos favoritos, para servírselos cuando regresara de la escuela. Sabía que llegaría desilusionado y de ese modo esperaba aliviarle un poco la pena. Le dolía pensar que él no iba a recibir muchos obsequios. Ninguno, quizá.

Esa tarde, puso en la mesa los bizcochos y el vaso de leche. Al oír el bullicio de los niños, miró por la ventana. Como cabía esperar, venían riendo y divirtiéndose en grande. Y como siempre, Chad venía último, aunque caminaba algo más de prisa que de costumbre.

La madre supuso que estallaría en lágrimas en cuanto entrara. El pobre venía con los brazos vacíos. Le abrió la puerta, haciendo un esfuerzo por contener las lágrimas.

-Mami te preparó leche con bizcochos-dijo.

Pero él apenas oyó esas palabras. Pasó a su lado con expresión radiante, sin decir más que:-¡Ninguno! ¡Ninguno!

Ella sintió que el corazón le daba un vuelco.

Y entonces el niño agregó:

-No me olvidé de ninguno! ¡Ninguno!

Dale Galloway

Es notable cómo puede verse la realidad desde tan diferentes puntos de vista. Y también es notable la diferencia en la valorización de distintas personas ante un mismo acontecimiento. Muchas personas valoran lo recibido, y sienten cierta satisfacción por dar, siempre y cuando ello les represente una reciprocidad; el recibir algo a cambio de lo dado. Y sienten que se equivocaron cuando dieron algo cuya respuesta no significó recibir alguna cosa. Otras personas, en cambio, disfrutan de dar; se sienten bien por ese acto puro, por el bien que hicieron, y ese bienestar es toda su recompensa.

Sienten felicidad por poder dar, por poder brindar, por poder brindarse.

Es un acto puro de amor, que no espera recompensa alguna y, ni siquiera, agradecimiento. Quien así se expresa, quien así se siente feliz, tiene la felicidad asegurada. Porque esa felicidad no depende de ninguna otra cosa que de su propio acto. No es susceptible a la frustración de la falta de respuesta porque no espera ninguna. Pero la pureza de su acto es de tal magnitud, su amor inmanente es tal, que seguramente recibirá muchas más muestras de amor y de agradecimiento que quien detrás de su dar escondía la secreta intencionalidad de recibir.



Reflexión: Graciela Heger A