lunes, 1 de febrero de 2010
TU OLOR
Tu olor
Nos arrancamos la ropa y la piel. Imposible estar más desnudos. La saliva fluye por la gravedad y en hondos lagos va a mezclarse con el sudor, en un cóctel improbable. Tu olor ahora es perfecto. Muerdes mi oído y mucho más adentro. Mucho más adentro. Quiero ser la manta que te cubre y la sombra que te cubre y la noche que nos cubre y que no tiene por qué acabar nunca, aunque el Sol hace rato que asoma. El aire hierve. Burbujeante lava donde antes nuestra piel. Estoy a punto de silbar. Como una locomotora o como una cafetera. Muerdes. Hiervo. Paramos.
Tu cabeza se toma un respiro encima de mi hombro, preparándose para el siempre penúltimo asalto. El espacio entre nosotros se reduce al mínimo, ni siquiera cabe el vacío. Ya ni la piel nos separa. También muerdes, pero más suavemente, los labios. Pasaré horas anudando mis dedos con los tuyos, enrollándolos, y ni Alejandro Magno podrá separarlos. Y con tu pelo. Tu olor ahora es perfecto. No sé qué brazo es mío y cuál pierna tuya, pero no importa: los compartimos. Un brazo te CUBRE y acerca. Debe ser mío.
Una campana muy cerca señala el fin del descanso y se reanuda el combate. Volvemos a saltar sobre este ring tuyo. Seguramente acabe perdiendo. KO técnico
EXTRAIDO DEL BLOG:http://comosisifo.blogspot.com/?expref=next-blog